Comienza el día grande de la 3D Printer Party 2023. Son las 9 de la mañana y el ambiente es calmado, muchos aún duermen en las tiendas de campaña y aún no se han ido a dormir y siguen imprimiendo desde la noche anterior. Entre los puestos podemos ver que ahora las máquinas preciadas son las cafeteras, que suplen la falta de horas de sueño con una buena dosis de cafeína.
Poco a poco, los participantes van llegando, y es que en nada comienzan los primeros talleres y ponencias del sábado. Uno de las propuestas más divertidas y originales es la competición de robótica organizado por Enric de Share Horizons, allí robots impresos en 3D juegan al fútbol o se parten el lomo en el cuadrilátero. Por otra parte, Ultec organiza su taller de pen 3D, en el que los más pequeños tienen un primer acercamiento a la impresión 3D. Allí ponen a prueba su creatividad y hacen sus primeros diseños 3D.
Mientras tanto los últimos participantes llegan al pabellón y ocupan las pocas mesas que quedan libres en el polideportivo. Nosotros nos acercamos a hablar con los makers, cada uno tiene su historia, para muchos es un simple hobby, otros están empezando a emprender diseñando o fabricando piezas. Algunos empezaron a imprimir hace 4 o 5 años, pero la pandemia fue lo que hizo explotar su pasión por la impresión 3D; otros en cambio llevan más de 10 años de experiencia a sus espaldas.

Lo bueno de la impresión 3D es que permite explotar al máximo la creatividad: diseño de moda, maquetismo, modelismo, escaneado 3D, electrónica… La 3D Printer Party es la oportunidad de poner en común todas esas creaciones realizadas durante el año, de compartir ideas, de servir de inspiración.
El día avanza y cada vez el ambiente es más festivo. Ya por la tarde, se improvisa un pequeño concurso de talentos con instrumentos impresos en 3D. Varios de los participantes se dan cita en el escenario y, en nada, se ha montado un concierto improvisado para más de 100 personas.
Los finalistas del Premio Nacional de Impresión 3D
Este año la cosa ha estado reñida. Cada edición, el nivel del Premio Nacional de Impresión 3D sube. En total, 6 categorías diferentes (mejor diseño adaptado, impresión, postprocesado, mecánica, máquina) competirán por alzarse con el gran premio en cada una de las categorías.
Control 3D se encarga de anunciar los finalistas de está edición. Entre los que se encuentra el busto de Black Panther a mejor impresión, una figura de Goku en Dragon Ball GT a mejor postprocesado o la réplica de un motor a mejor mecánica. El finalista a mejor aplicación 3D es para el 3D Spinner Braille, un modelo que facilita el aprendizaje del alfabeto braille; y mejor diseño adaptado encontramos un violín impreso en 3D. Por último, en la categoría de mejor máquina el Proyecto B.E.E.R. se ha alzado como finalista, aunque tendrán que esperar hasta el domingo para conocer el ganador.
En busca de un récord del mundo
Pero, sin duda, la mayor atracción de la tarde es el intento de Récord Guinness. Ya se consiguió de manera no oficial en la 3D Printer Party 2018 con 161 impresoras imprimiendo de manera simultanea. Actualmente la cosa está más complicada, el récord de más impresoras imprimiendo a la vez en una sola habitación está en 1096, pero se espera superar con creces la cifra anterior.
César Galera, de Control 3D y Pablo Ramos, de Tú Factoría 3D se preparan para inmortalizar el momento. Para ellos, en la pista del pabellón Amaya Valdemoro solo pueden estar personas que estén imprimiendo. Las gradas se llena de visitantes y participantes que esperan impacientes por ver el resultado de este gran reto.
De fondo música épica y uno a uno se van contando las impresoras. Algunas no están funcionando, otras se han parado y no cuentan, pero cuando aún falta la mitad por contar ya se acerca a las 200 impresoras trabajando. Las últimas se cuentan en silencio bajo un público expectante por saber la cifra final, parece que no se va a batir el récord oficial.
Llega el momento de la verdad, Control 3D coge el micrófono y da la cifra: 312 impresoras trabajando de manera simultanea y el pabellón se funde en un gran aplauso. Se ha duplicado la cifra conseguida hace 5 años, una muestra más del crecimiento que ha tenido el sector de la impresión 3D en los últimos años.
Tiempo para la fiesta
Por la noche llega el momento de celebrar. Fuera en el parking un food truck reúne una larga fila de makers hambrientos. Por suerte, la espera se hace mucho más amena al ritmo de la disco-móvil que anima a los participantes.
Sin duda, la noche de la 3D Printer Party es uno de los momentos que más crean comunidad. Momento tranquilo de compartir bebida y comida, allí se ha montado una tabla improvisada de quesos, embutido y hasta hay un jamón con jamonero incluido. Muchos de los participantes se van yendo poco a poco a dormir, pero los más fieles al espíritu de la party no se acostarán hasta bien entrada la noche.
Aún queda un día por delante y las fuerzas se van mermando. Algunos ya han recogido sus impresoras 3D, pero muchos apuraran al máximo para disfrutar de la gran fiesta del aficionado a la impresión 3D.