MakeGood NOLA ha desarrollado y creado la primera silla de ruedas modular impresa en 3D, para niños de 2 a 8 años. Noam Platt, fundador de la empresa, ha diseñado todas las piezas de la silla de ruedas en una impresora 3D estándar.
El laboratorio de diseño adaptativo de MakeGood NOLA con sede en Nueva Orleans, planeó este proyecto con el fin de hacer frente al alto coste de los dispositivos de movilidad reducida. Además los modelos estarán disponibles como archivos descargable de uso legitimo.
¿Cómo se diseñó esta silla de ruedas?
La silla de ruedas, denominada por su creadores como Toddler Mobility Trainer (TMT) se crea a partir de un diseño modular, es decir, que no requiere ningún tipo de pieza motriz complementaria, ni ningún tipo de pegamento para ensamblarla.
Para personalizar y hacer más eficiente del diseño de la Toddler Mobility Trainer, los fundadores contactaron con fisioterapeutas de todo el mundo para ofrecer mayor movilidad e independencia a los niños que presenten algún tipo de discapacidad.
En un video de redes sociales, Platt aclaró algunas cuestiones sobre el producto. Primero explicó cómo se decanto por un diseño modular, ya que es más fácil de fabricar y cualquier usuario en posesión de una impresora 3D y filamento PETG puede imprimir los modelos.
Por otro lado, Platt, también ha recalcado la personalización que contiene la impresión 3D. Permite crear modelos en cualquier color y modificarlos para adaptarlos a las necesidades especificas que necesiten los usuarios.
Materiales utilizados para hacer más resistentes las sillas de ruedas
Las sillas de ruedas han sido impresas utilizando filamento PETG. Un material muy resistente a los impactos, de alta durabilidad, buenas propiedades mecánicas, buenas propiedades térmicas y que ofrece mayor flexibilidad que un filamento ABS.
También, es un material esterilizable, resistente a los químicos y menos frágil que otros filamentos polímeros. Además si alguna pieza se deteriora o rompe, se puede volver a reimprimirla, en lugar de remplazar la silla completa.
Todas las piezas que componen la silla de ruedas han sido impresas en 3D: el cuerpo de la silla, las ruedas, los neumáticos, el asiento, las correas de seguridad, el reposapiés ajustable y el compartimiento trasero para guardar los objetos personales o el equipo médico.
Como podemos ver la fabricación aditiva no solo supone un avance tecnológico y económico. Sino también social. La fundación de MakeGood ha donado 1600 sillas de ruedas personalizables. Con el objetivo de ofrecer soluciones a aquellos niños que sufren de algún tipo de discapacidad.
El grupo de investigación aun continua haciendo algunas pruebas finales, para adaptar las necesidades más especificas de cada usuario a la silla y para intentar encontrar el diseño perfecto de la Toddler Mobility Trainer, antes de su lanzamiento publico.